¿Y si te dijera que existe un reloj cuadrado que combina materiales futuristas, un movimiento esqueletado y comodidad diaria sin sacrificar estilo ni confort?
¿Te suena exagerado? Piénsalo otra vez.
Tuve el placer de revisar el Rado True Square Automatic Skeleton, una pieza impactante que redefine el lujo cotidiano con una identidad de diseño distinta.
Primeras impresiones
Comencemos por lo que hace que este reloj sea inolvidable a primera vista: su aspecto visual.
La caja cuadrada de 38 mm presenta bordes redondeados y un grosor de solo 9,7 mm, lo que la hace muy delgada para una pieza de cerámica. Fabricada en cerámica de alta tecnología con plasma, la caja combina presencia con sutileza. El proceso de plasma exclusivo de Rado le da a la cerámica un brillo metálico sin contener metal. ¿El resultado? Un acabado liso, ligero y resistente a rayones que se adapta perfectamente a la muñeca.
La esfera
La esfera esqueletada es la verdadera protagonista. Ofrece una vista completa del movimiento interno, permitiéndote observar la belleza de la relojería mecánica. Cada mirada revela un nuevo detalle.
El reloj incorpora cristales de zafiro tanto en el frente como en el fondo de caja, ambos con tratamiento antirreflejo. A las 4 en punto, se ve el ancla giratoria en color rodio, un detalle simbólico que honra el legado automático de la marca desde los años 50.
En el interior: el calibre Rado R808
Este reloj funciona con el calibre Rado R808, un movimiento automático esqueletado con visualización de tres agujas y sin posición de fecha fantasma — un detalle pequeño pero bien pensado que los coleccionistas valorarán.
El movimiento incluye un espiral Nivachron™ con resistencia antimagnética y ofrece una impresionante reserva de marcha de 80 horas, más de tres días sin necesidad de carga.
Luminosidad
El Rado True Square también brilla por la noche. El SuperLumiNova® blanco aplicado a los marcadores y agujas emite un brillo sutil en la oscuridad y permanece nítido durante el día.
Pulsera
La pulsera integrada de cerámica negra mate con plasma refleja el diseño de la caja y tiene un discreto cierre de mariposa. Es suave, elegante y muy cómoda para llevar tanto en la oficina como en la noche.
Reflexión final
Seamos sinceros: este no es un reloj tradicional. Y eso es exactamente lo que lo hace especial.
El Rado True Square Automatic Skeleton adopta un lenguaje de diseño minimalista, mecánico y claramente moderno. Para quienes están acostumbrados a esferas redondas o diseños convencionales, esta versión cuadrada es un soplo de aire fresco.
Si nunca has tenido un reloj esqueletado —ni uno cuadrado— este puede ser el indicado para incorporar ambos. No intenta pasar desapercibido. Se afirma con confianza en su estilo único.
Y lo más importante, es cómodo, expresivo y fiel a sí mismo.
Gracias por leer. Si disfrutaste esta reseña, no te pierdas la versión en video en Timeless Catalyst. Hasta la próxima, sigue marcando el tiempo con propósito.
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